EL MUNDO NAVEGA EN LA VIRTUALIDAD
Los tratamientos de precisión y la atención a crisis de salud mental son posibles gracias a las innovaciones en entornos digitales. La meta son procedimientos adaptados a cada paciente.
Elena Paucar.
2023-01-01T08:00:00.0000000Z
2023-01-01T08:00:00.0000000Z
El Comercio (Ecuador)

https://prensadigital.ec/article/282076280951290
PORTADA
Medicina, política, minería, logística, educación, cine, arte, música, petróleo, espiritualidad, deportes, entre otros ámbitos, buscan en la realidad virtual, la inteligencia artificial, el multiverso... a sus aliados para desarrollarse. Ecuador hace su incursión. Los límites se diluyen. La salud en el metaverso empieza en el mundo real, salta al digital y emprende un viaje de retorno luego de cumplir una misión específica: dar en el blanco con diagnósticos y tratamientos de precisión. La tecnología en este campo se abre camino desde hace décadas. En 1990, la realidad virtual se comenzó a usar solo como analgésico en consultorios odontológicos. En el 2000, la impresión 3D entró a los quirófanos para guiar con exactitud a los cirujanos. Y la telemedicina surgió en 1988, pero aceleró su marcha con la pandemia de covid-19. ¿Qué más puede venir? Mucho. El vertiginoso desarrollo tecnológico y la interrelación de diversas disciplinas científicas crean un mundo de posibilidades en tratamientos personalizados. En esa vía se embarca la modelización matemática con los gemelos digitales. Engendrados por un sinnúmero de ecuaciones, son una copia útil para experimentar con la terapia más adecuada antes de probarla en el mundo real. Gemelo en números Cada componente de la sangre, cada parte del corazón y sus arterias. Todo ha sido llevado al computador bajo un modelo matemático construido en la última década. Este es uno de los ejemplos más reales de un gemelo digital, un diseño que suma el aporte de distintos centros de prestigio, entre ellos la Universidad John Hopkins. Juan Carlos de los Reyes dirige el Centro de Modelización Matemática de la Escuela Politécnica Nacional (EPN), donde se usa esta herramienta para hacer predicciones del covid-19 en Ecuador. Explica que se parte de un problema real, se buscan las variables más importantes, se describen las estructuras del problema con ecuaciones diferenciales y relaciones cuantitativas. Luego se hace la simulación y, finalmente, una prospectiva en el mundo real. “Con este tipo de relaciones se conoce cuál será la reacción, por ejemplo, ante una determinada medicina”, dice el investigador. La investigación va más allá. Ahora mismo están en marcha gigantescas alianzas entre instituciones científicas para sumergirse en el complejo funcionamiento del corazón y del cerebro. El salto de la telemedicina Cuando Ánimaec se estrenó hace dos años, benefició a unos 500 usuarios. La línea de ayuda de atención en crisis y emergencias de salud mental pasó del teléfono convencional a una ‘app’ que cerró el 2022 con casi 3 000 usuarios. José Rivadeneira coordina este servicio tecnológico del Instituto de Neurociencias de la Junta de Beneficencia de Guayaquil. Dice que a través de este asistente virtual 24/7 han logrado bajar en más del 80% los índices de malestar, vinculados a intentos de suicidio. El siguiente paso será dar consultas con cascos de realidad virtual que serán calibrados. Cercanía frente a la distancia y contar con un profesional a la mano. Esta fórmula ha dado impulso a más de 97 000 ‘apps’ de salud disponibles en el mundo, desde aquellas que miden el estrés por la voz hasta las que alertan el riesgo de exposición al sol. Para dar más impulso a las tecnologías, la Organización Mundial de la Salud creó el Atlas de la Salud Digital. La plataforma une a médicos con donantes y ha dado paso a más de 800 proyectos para mejorar la calidad de vida con aplicaciones para combatir la desnutrición, la violencia sexual, fortalecer salud mental, entre otros frentes.
es-ec