EN EL VAR LA VIDA ES MÁS CÓMODA
Las ciudades andan inseguras dijeron todo el año. Y como no creyeron a tanto vecino inconforme y choreado fueron a ver las cámaras; pero de ahí a la acción han pasado 12 meses. Y ahí siguen, viendo el fútbol, digo... la evidencia.
La Capitana.
2022-12-28T08:00:00.0000000Z
2022-12-28T08:00:00.0000000Z
El Comercio (Ecuador)

https://prensadigital.ec/article/281509345261318
ESPECIAL DE INOCENTES
Más criticadas por su efectividad que los estados de excepción, de casi nada han servido esas miles de cámaras - las particulares y comunitarias- para captar lo que alcancen de tanto pillo y maleante armado hasta las barbas. Si la estrategia era usarlas como ficha clave para una revisión posterior, así como hicieron los igual de abucheados árbitros, tanta imagen grabada y difundida por las redes solo ha traído sustos y alarmas que tampoco suenan. Y eso que las han revisado una y otra vez. Más que el virtual y hasta con biela en mano. Porque así mismo investigan dijeron, no es un invento. Porque para inventarse pretextos son campeones. Pero no como los argentinos, aunque las burlas no han faltado, y los enojos ni se diga. Ah, no; pero nada de majaderías y gestos inapropiados. Menos mal eso ni se ha visto. Aunque sí han resultado buenazos en lengua y para pitar a favor de los que por arte de magia salen huyendo de la cancha y sin cobrarles ni el penal. No es ni para confundirse tanto de pasión, como lo es para muchos este sufrido rey de los deportes. O bueno sí, porque el crimen resulta que aún sigue siendo pasional. Cuentan que la tecnología ayuda y transforma la emoción de los partidos, pero ya a estas alturas -donde hasta nos mandan a los penales y con una defensa ya fundida por tanto patear- parece que estorba. No así a los ladrones que meten mano cuando uno ni cuenta se da. Y aunque el VAR lo capta todo, para no agrandar el relajo lo ven, lo apagan y mejor se van.
es-ec